Leer: Hageo 2:4
Ver: El Señor obra a tu favor
Dios trabaja, aunque nuestros ojos no lo vean, Él está obrando.
Si Dios trabaja, nos toca tener la fe suficiente para creer que debajo de las circunstancias difíciles está sucediendo algo poderoso.
Dios te dice hoy, que Él está contigo, esfuérzate, cobra ánimo y no te desalientes.
No sé si a ti te pasa; pero a mí me sucedía, yo quería ver inmediatamente la respuesta de Dios y el cumplimiento de las promesas. Además, me imaginaba cómo sería y me hacía mi propio plan.
Entonces, me levantaba cada mañana queriendo ver lo que yo quería, y al no verlo, me desanimaba y pensaba que Dios no respondía mis oraciones.
Con el tiempo, he ido aprendiendo a confiar en que Dios está haciendo su obra, aunque no lo pueda ver. De pronto, sale a la luz para sorprenderme y maravillarme con su respuesta.
También he aprendido a tener fe en lo que Dios promete, y paciencia para esperar su tiempo perfecto. Otro conocimiento que he adquirido es que, lo que Dios tiene en Su mente es mucho más grande que lo que está en mi imaginación.
Pidamos con el corazón lleno de fe esta oración:
“Yo decido creer que Dios está obrando en mi vida, en mi familia, en mi economía, en mi salud, en mi trabajo y en todo lo que yo necesito en el nombre de Jesús. Amen.”